UN NUEVO COMIENZO

La noche estaba instalada sobre Londres y una densa niebla lo ocultaba todo.
Harry caminaba velos por las angostas calles como si alguien lo siguiera.
Se adentro en un estrecho callejón buscando algo en las fachadas de las casas de esa calle
Se detuvo cuando vio el pequeño lugar, un pequeño café que no llamaba la atención de nadie.
Entro y se sentó repasando la pequeña sala con la vista había algún que otro cliente sentado escuchando cantar a una joven una triste canción, esto fue todo lo que encontró.
Días atrás recibió una lechuza de Aberforth Dumbledore el cual lo citaba a la media noche de ese día en ese lugar, la nota aclaraba que era de suma importancia que asistiera.
Harry no se explicaba porque lo habia citado allí siendo que el sabia donde encontrarlo.
Luego de unos instantes el camarero se le acerco y dijo

-Buenas noches señor, ¿con que lo puedo complacer?

-Solo tomare un café. Respondo Harry.

-¿Esta seguro que no desea nada mas señor Potter?

Harry lo miro desconcertado, ese camarero lo conocía.

-No se alarme, el señor Dumbledore me pidió que lo recibiera, el me dijo que vendría,

-No entiendo dijo Harry ¿usted es mago?

-No, dijo el joven acercándose a Harry como para contarle un secreto al oído
-yo...yo soy un Muggle pero conozco bien su mundo señor.

-Pero eso no es importante ahora señor Potter, es necesario que me acompañe.

Harry se puso de pie y comenzó a zigzaguear entre las mesas del café detrás del camarero.
Este lo llevo a la parte del fondo a una pequeña habitación a modo de despensa del café.
Cerró la puerta y le indico a Harry con un gesto que debía atravesar una pequeña puerta que se encontraba al otro lado de ese deposito.

Harry entro por ella maravillándose de lo que encontraría del otro lado.
Sorprendido vio que estaba en la parte trasera del “La cabeza de Puerco “en Hogsmeade. La misma habitación que le sirvió de entrada al castillo tantos años atrás.
Harry miro la puerta y exclamo.
-Increíble, es un pasaje!
Se acerco a la chimenea donde el retrato de Ariana lo saludo esbozando una sonrrisa.

-Muchos años han pasado señor Potter .Dijo la familiar vos de Aberfoth al otro lado de la sala.

-Señor Dumbledore, disculpe no lo había visto!

-No te disculpes hijo, toma asiento.
Abatido por los años Aberforth seguía manteniendo su postura erguida y el porte de un hombre fuerte.
Se sentaron a la mesa y compartieron una bebida caliente cuando Aberforth rompió el silencio.

-Tenemos un problema!!!

-¿Tenemos? pregunto Harry.

-Hace tres días entro aqui un hombre extranjero haciendo muchas preguntas sobre la batalla del 2 de mayo.

-Me llamo mucho la atención aunque trate de no denotar mi interés.

-Pero en un momento sucedió lo inesperado. El extraño menciono a alguien, alguien del pasado, alguien que me quito mucho, dijo Aberfoth contemplando a Ariana.
-El extraño menciono a Gellert Grindelwald.

-Esto me preocupo
-Por lo que he podido investigar en estos días Grindelwald antes de ser muerto por Voldemort en su prisión de Nurmengard dejo escritas sus vivencias.

-Este extraño encontró su diario oculto en su celda con todos sus conocimientos.
Todo lo inherente a las Reliquias de la Muerte esta allí, toda su Investigación
-El bien Mayor como lo llamaban el y Albus.

-Conozco bien la historia señor Dumbledore. Respondió Harry.

-Eso no tiene importancia hoy las reliquias se perdieron Señor!

-No se porque me dice esto, ¿no entiendo a donde quiere llegar?

-Mira Harry el ya sabe Quien es el portador de las reliquias.

-El te esta buscando….

-Quizás el no sepa que se perdieron pero usted esta en peligro Señor Potter…

CONTINUARA…..


Compartelo con tus amigos!!!
Tweet
Compartir